Los teclados son todo un mundo
Lo que hemos contado aquí es apenas la superficie de un mundo que se extiende. La experiencia de usar un teclado depende de muchas cosas y cada una es perfectamente personalizable si estás dispuesto a hacer el gasto e invertir el tiempo.
El tipo de plástico de los interruptores, la resistencia de los resortes, la lubricación del mecanismo, los materiales del teclado, el alto y la forma de las teclas… todo se puede ajustar para lograr el sonido y la sensación que uno quiere.
También, por supuesto, está el aspecto estético: El color del teclado, el diseño de las teclas, la retroiluminación en las letras y todas las luces RGB que se te antojen. Así puedes lograr desde una apariencia discreta para un espacio de trabajo, hasta el look más gamer que se te pueda ocurrir.
Hay quienes ajustan un teclado usando materiales como gomaespuma, hay quienes los ensamblan pieza por pieza. En fin, el teclado es, junto con el mouse, una de las herramientas para interactuar con nuestra PC y hay quienes quieren hacer una experiencia única.
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